Y pos también hay veces que las cosas bonitas truenan, que empieza a oler feo la cocina y se te queman los frijoles o te pones una bota roja en la derecha y una café en la izquierda y te das cuenta hasta que estas con ella, o también el bonito corrido de tono norteño que llegas al baño con unas ganas brutas de zurrar pero no hay papel, y así me puedo ir con millón de cosas más para hacerte entender el porqué de cosas tan frágiles, y es que el dinero es muy maldito, hay un dicho que dice: “El dinero no sé dónde lo dejé, pero los aplausos me los llevo a la tumba”; creo que en estos tiempos uno ya no come de aplausos nada más. 

Y es como si estás trabajando por mucho tiempo para conocer y llevar a un fandango y kermes a la hembra de tus noches de ensueño, le echas un chingo de ganas para quedar bien con ella, la llevas a bailar con música redova, acordeones y adornos con luces de bengala y después de ponerle un gran meneo en la pista de baile te la quieres llevar pa’l monte con sushi casero que le llevaste para no pagar nada, pero por güey se te echo a perder y le huele el atún bien gacho; el premio se te va, la hembra no regresará. 

Con todo el respeto, a mí se me hizo una pendejada correr al mánager de la Selección Mexicana de Beisbol de esa manera. Cómo puedes matar así todas las labores que Juan Castro y su equipo de trabajo estuvieron haciendo; largas horas de trabajo, poniendo el corazón sin sueldo, pero hay que saber y tener en mente que el corazón también come, que la maquina necesita aceite, que, aunque seas camello o caballo también necesitas comer y tomar agua. Es una pena que sigan pasando estas cosas y creo, más ahora, que a menos de 48 días para que empiecen los Juegos Olímpicos no tengan ni siquiera un roster con los peloteros seleccionados. Ver información aquí. 

Y la verdad, si un pelotero juega con el corazón, juega para divertirse —porque el beisbol es un juego—, pero ¿y sus familias qué pedo? ¿Van a comer guantes y pelotas o qué? Por eso son beisbolistas profesionales, no son robots o monos de hule. Por este escrito me pongo de parte de Juan Castro, pelotero al que miré muchas veces jugar con elegancia el infield en Dodger Stadium, pelotero que cuando hacia un atrapadón o lo anunciaban cada turno al bat, yo me emocionaba y me sigo emocionando ahora por su gran trabajo que sigue haciendo en Grandes Ligas como coach de Phillies de Philadelphia.

Platiqué del tema con dos grandes analistas mexicanos de béisbol y me dijeron esto: 

“Es muy triste y lamentable que a estas alturas sigan ocurriendo situaciones como éstas. […] Me parece una falta de respeto para Juan Gabriel Castro y la organización de los Phillies, que ya le habían dado permiso en plena temporada. Lo más lamentable es que estamos a nada de los Juegos Olímpicos, si no sabíamos nada de la Selección Mexicana y su roster que nos representará, ahora agrégale sin mánager, ¿quién será el encargado de dirigir al tricolor? No veo en el panorama muchos candidatos con los blasones y la jerarquía que exige un evento como éste; se necesita alguien de Grandes Ligas y no veo quién pueda tomar esa responsabilidad en este momento.”

Alejandro Campos, analista de beisbol y voz oficial de Sultanes de Monterrey.

Junio 8, 2021.

 

 

 

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“Es para mí una situación triste porque se consiguió el boleto y casi dos años después son los Juegos Olímpicos, por la pandemia no hubo en el 2020 y aunque se tiene una planeación, no se tiene un mánager y realmente no se tiene una certeza del plan de trabajo. Me imagino yo, porque hay gente muy preparada entre quienes forman el comité, que ya tienen el diseño de juegos de pretemporada, porque ya se sabe que uno de los rivales es Japón, ¿cómo jugarle Japón? Hay que tener scout de avanzada ya en Japón, su liga tiene a la mayoría de la selección.

El otro rival podría ser de acuerdo con la siembra de México, nada menos que República Dominicana, pues el que gane el preolímpico de Puebla, entonces, el scout debe estar ahí.

Si ya no se puede con Juan Gabriel Castro, que al parecer se rompió por completo la relación, es buscar a otra persona, pero que empiece ya una persona que esté al 100% metido en el proyecto. Me imagino que ya se tiene una base de los peloteros que van a ir, será un roster ampliado porque hay antidopaje para Juegos Olímpicos y se manda, tengo entendido; y el antidopaje de Juegos Olímpicos es otro sistema, es más extenso; entonces aquí es tener ya al mánager. Es una pena, una desgracia de verdad lo que pasó con Juan Gabriel Castro, sinceramente; o sea, él estaba en el proyecto, ya tenía la planificación, todo para una gira; de hecho, tengo entendido, también que tenía una gira para oriente, para jugar allá algunos encuentros, claro, en el pasto de los terrenos donde se va a jugar Juegos Olímpicos porque nada más es una oportunidad, y si no ganaste, te vas; o sea, es rápido el torneo. De por sí el béisbol está buscando glorias en el profesionalismo que no se han conseguido, en el clásico mundial, y ahora llega el máximo escaparate, la máxima vitrina ¡hay que aprovecharla! Es increíble que no se pueda aprovechar, caray. La oportunidad de medalla es grande, hay que aprovechar, pero con este tipo de cosas, otra historia negra más para el béisbol mexicano, no pues, ¿cómo?” 

Juan Ángel Ávila, cronista de béisbol.

 Junio 8, 2021.

Atentamente,

Pliego Villarreal

Fotografía principal: Adobe Stock.