Existe la creencia de que realizar ejercicio en ayuno puede traer mejores resultados en nuestro organismo y lograr una mejor quema de grasa, pero ¿qué tan cierto es esto?. Los pros y contras del ayuno previo al ejercicio dependen del tipo, frecuencia e intensidad del entrenamiento que se realiza.

Existe evidencia suficiente relacionada con los beneficios de la actividad física de baja intensidad y larga duración en ayuno, pues durante este proceso se utiliza la grasa como fuente energía, es decir, favorece la oxidación de lípidos, la disminución de triglicéridos, grasa visceral y el colesterol LDL. 

Los ejercicios de baja intensidad y larga duración son aquellos que se trabajan en fase aeróbica —comúnmente conocidos como ejercicios de cardio—, como: caminata, natación, baile, elíptica o pedaleo. Para lograr mejores resultados en la quema de grasa es necesario mantener una frecuencia cardiaca estable y en un periodo mayor a 30 minutos. 

Por otro lado, realizar ejercicios de alto impacto, explosivos o de fuerza en ayuno, no es recomendable, pues los valores de glucógeno muscular —energía guardad en los músculos— bajan rápidamente, de esta forma, en vez de utilizar grasa como fuente de energía, se utiliza musculo; es decir, se puede almacenar grasa como mecanismo de defensa. 

Los ejercicios de alto impacto ­—o ejercicios anaeróbicos— no se enfocan implícitamente en la respiración, son ejercicios de corta duración, pero de alta intensidad; es decir, el musculo requiere más oxígeno para hacer este tipo de ejercicio y, por lo tanto, ayuda a su fortalecimiento e incremento de masa muscular.   

Para tener una correcta alimentación es necesario analizar qué tipo de actividad es la que se va a realizar y los objetivos sobre los cuales se quiere trabajar, de esta forma se podrá determinar el plan de alimentación especifico a tus necesidades. 

Si buscas una mayor quema de grasa, sugiero que realices actividades de larga duración, pero baja intensidad, y puedes realizar ayuno para obtener mejores resultados. En cambio, si tu objetivo es un aumento de masa muscular, apóyate en el ejercicio de alto impacto y no dejes de consumir, previo a la actividad, un refrigerio que contenga hidratos de carbono y grasa.